Sociedad civil considera invocar a Cascos Azules ante cuestionamientos a FFAA: Mujeres por Honduras
La institucionalidad democrática de Honduras está en riesgo debido a las maniobras para cooptar la institución encargada de organizar y supervisar las elecciones, lo que compromete seriamente la transparencia, imparcialidad y legitimidad de los procesos electorales, manifestó en un comunicado la organización Mujeres por Honduras.
Tras calificar de grave situación política que atraviesa Honduras, la organización considera alarmante la denuncia pública realizada por la presidente del Consejo Nagional Electoral (CNE), Cossette López, quien declaró que el informe de investigación sobre un posible boicot en las elecciones internas ha sido manipulado.
“Esta revelación no solo expone una grave vulneración a la integridad de las investigaciones, sino que también coloca en peligro la integridad de quien ha tenido el valor de denunciarlo”. Afirma el comunicado.
Ante estos hechos y en vista de que el ejercito nacional ha decidido apartarse de la situación, la sociedad civil está considerando invocar la presencia de los Cascos Azules de Naciones Unidas, afirma Mujeres por Honduras.
La organización llama a la población nacional a condenar y evitar cualquier intento de socavar la independencia de los órganos electorales, asegurando que el proceso democrático se mantenga libre de injerencias políticas indebidas.
Igualmente a mantenerse vigilantes, exigir transparencia en el proceso de investigación sobre la posible manipulación del informe y de cualquier otra maniobra para apropiarse de las máximas investiduras del poder por vías no democráticas sopena de alta traición a la patria.

Pide garantizar la protección y la seguridad de López y de cualquier otra persona que participe en denuncias, para garantizar que prevalezca la voluntad popular, se respete la Constitución y se lleve a cabo un proceso electoral general que sea limpio, transparente y libre de manipulaciones por aquellos que intenten obstaculizarlo.
Finalmente establece que el silencio y la indiferencia ante estos hechos pueden llevarnos a una crisis aún mayor, en la que los derechos ciudadanos y las libertades fundamentales se vean comprometidos.