Fuerzas Armadas reprimen protesta indígena exigiendo castigo a asesinos de Berta Cáceres
Dos mujeres retenidas y dos hombres golpeados hubo este martes frente al Ministerio Público (MP) en Tegucigalpa, confirmó el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH).
El periodista Rony Espinoza de Radio Globo informó que los guardias de seguridad de la Fiscalía y los miembros del ejército dieron patadas a los indígenas y dos mujeres del COPINH fueron retenidas dentro del MP.
Una de las víctimas, el indígena Gaspar Sánchez declaró que en este país no se respetan los derechos humanos, hay un gobierno que no respeta los derechos humanos. “Hemos sido agredidos, golpeados por pedir que se esclarezca el caso de Berta Cáceres que no sólo que se capture al que disparó sino a quienes pagaron”, expresó.
Relató que “me dijeron qué para qué estaba poniendo eso ahí (una manta de protesta) que era prohibido y por eso empezaron a golpearme”.
Refirió que se ha estado pidiendo una reunión con el mismo Juan Orlando Hernández, con el ministro Julián Pacheco, con el fiscal Óscar Chinchilla y no ha hecho caso a las demandas.
El comunicador del COPINH, Selvin Merlo, manifestó que “estamos en una toma pacífica desde la mañana y hemos subido a poner una manta y por eso nos han agredido policías, militares, guardias, me han metido para agarrarme a patadas y golpes”.
Según el testimonio de Merlo, la policía y los militares lo patearon durante varios segundos, informó el Comité por la Libre Expresión (C-Libre).
Después de la acción policial y militar, los manifestantes quebraron vidrios de la parte frontal y pintaron las paredes de vidrio del edificio en protesta por la agresión de los agentes armados.
Entre 2015 y lo que va de 2016, C-Libre ha emitido unas 10 alertas para denunciar hostigamientos contra el COPINH por reiteradas acciones de intimidación contra sus miembros, bloqueos, detenciones y persecución policial contra los periodistas de radios comunitarias, el asesinato de Tomás García, en 2015; el uso del derecho penal para intimidar a Berta Cáceres que culminó con su asesinato el 3 de marzo de 2016 y el crimen contra la vida de Nelson García, el 15 del mismo mes; bloqueos informativos y denegatorias de información, entre otras.